ARCO 35: Guía para sensacionalistas, ya sean prensa, público o profesionales
- cgartadvisory
- 23 feb 2016
- 3 Min. de lectura
Actualizado: 22 jun 2022

Keep calm, no os escandalicéis. Pensad y preguntad.
Ahora que acaba de empezar ARCO y que se celebran 35 años desde su primera edición, me gustaría recordar algo. ARCO es una feria de arte, no perdamos el norte. Me refiero a que no es una bienal, no es un circo y, pese a su carácter social, su objetivo no es juntar a gente frívola, estúpida y rica, como muchas veces se da a entender entre los sensacionalistas. ¿Es mucho más? Depende de cómo se mire, pero para esclarecer su objetivo esencial me voy a ceñir primero a la lógica económica de una galería de arte, que es el cliente principal de una feria.
Para que una galería asista a una feria tiene que afrontar un importante desembolso económico entre gastos de organización (estand, iluminación, montaje, etc.), transporte, seguros, personal, hoteles, comidas, etc., lo cual supone un gasto de varias decenas de miles de euros. Una galería no es ni una organización sin ánimo de lucro, ni una fundación, ni el proyecto de un marginado e incomprendido social. Es un NEGOCIO. Por tanto, la lógica más racional dicta que su primer objetivo es cubrir gastos, su segundo obtener beneficios y su tercero que el capital desembolsado no suponga un gasto sino una inversión a medio plazo en el caso de no cumplir los dos primeros objetivos. Todo esto significa que una galería necesita: vender, vender y vender. Por ende, el objetivo de ARCO es exactamente el mismo que el de las galerías de arte, lo que supone que sus esfuerzos se concentran en atraer aquellos con el interés y el capital necesarios para adquirir los objetos allí expuestos. Y dado que además la feria aspira a la excelencia, todas las propuestas y galerías son exhaustivamente escrutadas para atraer al comprador cultural más exigente. Sí, todo se reduce a que oferta y demanda se encuentren, pero la mejor de las ofertas y de las demandas. Y la pregunta es: ¿esto es malo?
Sé que la mercantilización de la cultura es un asunto de debate, controversia e incluso desprecio para una gran parte de la sociedad española, ya sea amateur o profesional que incluso exige acceso a la mejor oferta cultural –un debate interesante sería identificar los motivos por los cuales existe semejante animadversión a la entrada de capital privado en las artes plásticas–. Pero la realidad del arte es que a lo largo de su historia la concentración de capital (en ciudades y personas) ha sido esencial en la creación de las obras maestras más importantes, así como la instauración de la burguesía y su gasto en las artes ha sido fundamental en la creación de la Modernidad y Posmodernidad. Creo que la humanidad debería estar no sólo agradecida al capital de los coleccionistas sino que debería desear que estos siguiesen interviniendo todo lo posible en el arte (si lo que quiere es disfrutar en el futuro del mejor arte).
En ARCO el lucro ha sido y es la esencia, lo que abunda, y si no fuese así, ARCO no habría sobrevivido estos 35 años gracias a galeristas, artistas, coleccionistas y directores de museos/fundaciones con un denominador común: un vasto conocimiento en arte, estética e Historia del Arte. Todo esto hace que exista una lógica económica, pero también cultural, amparada por algunas de las figuras más relevantes nacionales e internacionales del mundo del arte. Consecuentemente, se puede decir, sin ningún género de dudas, que la feria es un foro sostenible abrigado por el conocimiento y el poder económico de algunas de las personas con mayor interés e inquietud por la vanguardia contemporánea. Así que no frivolicemos con cualquier elemento susceptible de burla sensacional por su incomprensión popular. Si no lo hacemos por respeto, que por lo menos lo hagamos por la vergüenza que supone el delatar tan alegremente semejante orgullo de analfabetismo cultural a los cuatro vientos. Con lo cual, por favor, antes de criticar, preguntad y tened predisposición a escuchar. Y si no entendéis, no tengáis miedo en preguntar de nuevo, pero escuchad. Para todo existe una explicación aplastantemente lógica, racional e interesante. Así que aprended a mirar a un mundo distinto, pero apasionante. Lo que ocurre en ARCO son ventas que forman parte del primer paso de una larga trayectoria para validar el arte de hoy y la historia de mañana.